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La serpiente terciopelo (Bothrops asper) es una especie venenosa que se encuentra en América Central y del Sur. Esta especie es reconocida por su gran tamaño y naturaleza inquieta, encontrándose distribuida en diversos hábitats.

Su coloración se asemeja a la de la serpiente barba amarilla. La serpiente terciopelo es responsable de muchas mordeduras en su área de distribución. En cuanto a su reproducción, las crías nacen vivas y su camada puede alcanzar hasta 100 individuos.

Características de la Serpiente Terciopelo

Tamaño y dimorfismo sexual

La  terciopelo, científicamente denominada Bothrops asper, es una especie de serpiente venenosa que habita en distintas áreas de América.

Tanto los machos como las hembras varían en tamaño, pudiendo medir entre 140 y 250 cm de longitud. Las hembras tienden a tener una mayor longitud que los machos. Esta diferencia de tamaño entre los sexos se conoce como dimorfismo sexual.

Patrón de color y características físicas

El patrón de color de la serpiente terciopelo se asemeja al de la serpiente barba amarilla. Su piel presenta rayas diagonales y diamantes de tonos marrones.

Las crías de serpiente deslumbran con un brillo especial, y los machos jóvenes exhiben una punta de la cola coloreada en tonos amarillos. Adicionalmente, muestran fosetas loreales a ambos lados de la cabeza, situadas entre el ojo y el hocico, las cuales les permiten detectar presas que emiten radiación térmica.

Distribución geográfica de la serpiente terciopelo

La serpiente terciopelo (Bothrops asper) es una especie que se encuentra en diferentes países de América. A continuación, se enumeran los destinos principales de su distribución: Países en los cuales habita esta especie.

Países donde se encuentra la especie

  • México
  • América Central
  • Colombia
  • Ecuador
  • Venezuela

Estos países albergan poblaciones de serpientes terciopelo en diversos hábitats y condiciones climáticas.

Hábitats habituales de la serpiente terciopelo

La serpiente terciopelo puede habitar una amplia variedad de hábitats, desde bosques húmedos tropicales hasta bosques espinosos.

Se adapta a diferentes condiciones y se encuentra cerca de lagos, ríos y arroyos. Prefiere evitar los bosques extremadamente secos, aunque se adapta de manera favorable a las áreas de tierras altas.

En su distribución geográfica, la serpiente terciopelo puede encontrarse en bosques perennes, bosques caducifolios y áreas cercanas a zonas habitadas por humanos donde también viven sus presas comunes, como ratas y ratones.

Es importante destacar que su capacidad para sobrevivir en diferentes tipos de hábitats y su adaptabilidad han contribuido a su expansión en América Central y del Sur.

Comportamiento y hábitos de la serpiente terciopelo

La serpiente terciopelo (Bothrops asper) presenta una serie de comportamientos y hábitos que le permiten sobrevivir en su hábitat.

En esta sección, exploraremos su actividad diurna y nocturna, así como su refugio y comportamiento defensivo.

Actividad diurna y nocturna

La serpiente terciopelo es principalmente nocturna, lo que significa que es más activa durante la noche.

Durante el día, tiende a buscar refugio en la hojarasca o entre las raíces de los árboles para protegerse de posibles depredadores y regular su temperatura corporal.

Al caer la noche, la serpiente terciopelo emerge de su escondite para buscar su sustento.

Se desplaza de manera sigilosa y aprovecha su excelente visión nocturna para detectar presas, como roedores, anfibios y aves, a los que caza utilizando su veneno letal.

Refugio y comportamiento defensivo

La serpiente terciopelo utiliza diferentes tipos de refugios, dependiendo de su edad y tamaño. Los especímenes juveniles pueden ser semiarbóreos, trepando a arbustos y árboles bajos para protegerse.

Los adultos, por su parte, suelen esconderse en la hojarasca o en agujeros en el suelo.

Esta especie tiende a ser nerviosa y defensiva, especialmente cuando se siente amenazada o acorralada.

Cuando se ve en peligro, la serpiente terciopelo adopta una postura defensiva, levantando su parte delantera del cuerpo y exhibiendo su cabeza triangular, a la vez que emite un fuerte siseo.

Si se la provoca aún más, puede moverse rápidamente y mostrar una agresividad vigorosa, mordiendo si se siente acorralada.

Es importante destacar que la serpiente terciopelo no ataca sin motivo y prefiere huir antes que enfrentarse a una confrontación. Sin embargo, si se le acorrala o se la molesta excesivamente, puede defenderse con su mordedura venenosa, que puede ser potencialmente letal.

Peligros y riesgos asociados a la serpiente terciopelo

La Bothrops asper, conocida comúnmente como serpiente terciopelo, es una especie venenosa que presenta un peligro para los seres humanos en las regiones donde habita.

En este apartado, exploraremos los peligros y riesgos asociados a esta serpiente, centrándonos tanto en las mordeduras y características de su veneno, como en su relación con los humanos y medidas de prevención.

Mordeduras de serpiente y características del veneno

Las mordeduras de serpiente terciopelo pueden ser muy peligrosas debido a la toxicidad de su veneno. El veneno de esta especie es hemotóxico, lo que significa que afecta directamente al sistema circulatorio y puede causar daño en los tejidos, coagulación anormal de la sangre y alteraciones en los órganos internos.

Los síntomas de una mordedura de serpiente terciopelo pueden incluir dolor intenso en el lugar de la herida, hinchazón, sangrado excesivo, ampollas, dificultad para respirar, náuseas, vómitos, mareos y alteraciones en la presión arterial.

Es importante buscar atención médica de inmediato en caso de una mordedura de serpiente terciopelo, ya que el veneno puede causar complicaciones graves si no se trata adecuadamente.

Relación con los humanos y prevención de mordeduras

La serpiente terciopelo está asociada con áreas habitadas por humanos, ya que frecuenta hábitats donde se encuentran sus presas comunes, como ratas y ratones. Esto aumenta el riesgo de encuentros y mordeduras.

Para evitar posibles mordeduras de serpiente terciopelo, es esencial mantener una distancia prudente y abstenerse de tener contacto directo con estos animales en su entorno natural. Algunas medidas de prevención incluyen:

  • Permanecer alerta y atento al caminar o trabajar en áreas donde pueden habitar estas serpientes.
  • Usar ropa protectora adecuada, como botas altas y pantalones largos, al adentrarse en zonas propensas a la presencia de serpientes.
  • Evitar meter las manos en huecos, zonas con maleza alta o lugares donde no se pueda ver claramente el suelo.
  • En caso de encontrar una serpiente terciopelo, mantener la calma, retroceder lentamente y alejarse sin hacer movimientos bruscos.
  • En áreas propensas a la presencia de serpientes venenosas, considerar la instalación de barreras físicas, como vallas, para evitar su ingreso en espacios habitados.

 

Es fundamental también contar con acceso rápido a servicios de emergencia y antiveneno en zonas donde la serpiente terciopelo es común, para asegurar una pronta atención médica en caso de mordedura.

Reproducción de la serpiente terciopelo

La reproducción de la serpiente terciopelo es un proceso fascinante y fundamental para el mantenimiento de la especie. En este apartado, , nos adentraremos en los elementos esenciales acerca del apareamiento, el período de gestación, la cantidad de crías y el cuidado que brindan los padres. ¡Descubramos juntos todos estos fascinantes aspectos!

Apareamiento y gestación

El apareamiento de la serpiente terciopelo suele ocurrir en diferentes momentos del año y varía según la región en la que se encuentre.

En este período, los machos se disputan entre ellos para ganarse el privilegio de aparearse con las hembras. ¡Descubre cómo la competencia y el cortejo se entrelazan en esta apasionante fase de la naturaleza!

Exhiben comportamientos de cortejo, como luchas y exhibición de fuerza.

Después de la cópula, la hembra queda gestante por un período de tiempo que oscila entre los 180 y 240 días. Durante este tiempo, el desarrollo embrionario ocurre dentro del cuerpo de la madre.

Número de crías y cuidado parental

Las serpientes terciopelo son vivíparas, lo que implica que sus crías se forman internamente en la madre y nacen en un estado vivaz.

Las camadas suelen constar de unas 30 crías, aunque se han registrado casos de camadas excepcionalmente grandes, llegando a alcanzar hasta 100 crías en algunos casos.

Una vez que las crías llegan al mundo, se tornan completamente autónomas y deben desenvolverse por sí solas.

No existe un cuidado parental por parte de los padres, ya que las serpientes terciopelo son animales solitarios y no se involucran en el cuidado de sus crías.

Las crías, desde el momento de su nacimiento, poseen un instinto natural que les permite buscar alimento y protegerse de depredadores.

La serpiente terciopelo tiene un proceso reproductivo especialmente adaptado a su hábitat, el cual desempeña un papel fundamental en la continuidad de su especie.

El conocimiento de estos aspectos nos permite comprender mejor su ciclo vital y contribuye a la conservación de esta fascinante serpiente venenosa.

Mitos y realidades sobre la Serpiente Terciopelo

A través del tiempo, la serpiente terciopelo (Bothrops asper) ha sido protagonista de innumerables mitos y leyendas que la envuelven en un halo de misterio y fascinación. A continuación, se presentan algunas de las principales ideas erróneas y realidades sobre esta serpiente venenosa.

  • Mito: Todas las serpientes terciopelo son mortales.
  • Realidad: Si bien la mordedura de una serpiente terciopelo puede ser peligrosa, no todas las mordeduras resultan en la muerte de una persona. La tasa de mortalidad por mordedura de serpiente terciopelo ha disminuido significativamente en las últimas décadas gracias a un mejor acceso a tratamientos antivenenos y atención médica adecuada.
  • Mito: Las serpientes terciopelo siempre atacan a los humanos de forma agresiva.
  • Realidad: Las serpientes terciopelo suelen ser cautelosas y prefieren mantener distancia de la presencia humana. Solo utilizarán su mordedura en situaciones de amenaza o cuando se encuentren acorraladas. Es fundamental mantener una distancia adecuada y evitar perturbar o provocar a estas serpientes en su entorno natural para garantizar una convivencia segura.
  • Mito: Todas las serpientes terciopelo tienen un veneno letal.
  • Realidad: El veneno de la serpiente terciopelo puede variar en composición y potencia entre individuos. Algunas serpientes terciopelo tienen venenos más potentes que otras, pero esto no significa necesariamente que todas sean letales. El efecto del veneno también depende de la cantidad inyectada y de la respuesta individual de la víctima.
  • Mito: Las serpientes terciopelo siempre inyectan veneno en cada mordedura.
  • Realidad: No todas las veces que una serpiente terciopelo muerde, se produce la inoculación de su veneno. A veces, las serpientes pueden realizar “mordidas en seco” sin liberar veneno. Sin embargo, esto no significa que no deba buscarse atención médica de inmediato después de una mordedura, ya que las lesiones por mordedura de serpiente pueden ser graves sin importar si se inyectó veneno o no.

 

Es importante comprender la realidad detrás de los mitos para promover una convivencia más segura y respetuosa con la serpiente terciopelo y otras especies de serpientes.

La educación y la conciencia son fundamentales para evitar conflictos innecesarios y garantizar la coexistencia pacífica con la fauna silvestre.

Curiosidades de la Serpiente Terciopelo

Aquí algunas curiosidades sobre la serpiente terciopelo (Bothrops asper):

Es una serpiente venenosa que se encuentra en América Central y el noroeste de América del Sur.

– Pertenece a la familia Viperidae y su nombre científico es Bothrops asper. También se le conoce como cuatro narices.

– Su coloración es variable, puede ser café, gris, rosada, verdosa o negra, con manchas en forma de “V” a lo largo del dorso.

– Es una serpiente de tamaño mediano que mide entre 90 cm y 1.5 metros de largo.

– Habita en selvas húmedas y bosques tropicales, a menudo cerca de fuentes de agua. Es terrestre y nocturna.

– Su veneno es hemotóxico, afecta la coagulación de la sangre provocando hemorragias. Sin embargo, no suele ser letal para los humanos.

– Cuando se siente amenazada infla su cuello, muestra la boca y produce un sonido parecido a un silbido.

– Es vivípara, puede tener entre 12 a 36 crías, las cuales miden aproximadamente 30 cm al nacer.

– Es una especie ovovivípara, las hembras retienen los huevos dentro del cuerpo hasta que nacen las crías.

– A pesar de su venomosidad, es importante en los ecosistemas controlando poblaciones de roedores y otros animales.

Preguntas Frecuentes

la serpiente terciopelo una especie que aunque no está en peligro de extinción debemos respetar

Preguntas, dudas, y respuestas sobre la Serpiente Terciopelo

La serpiente terciopelo, también conocida como Bothrops asper, habita en las regiones del sur de Norteamérica, América Central y el norte de Sudamérica. Su distribución abarca países como México, América Central, Colombia, Ecuador y Venezuela. Habita en diversos tipos de hábitats, como bosques húmedos tropicales, bosques perennes, bosques caducifolios y bosques espinosos, así como cerca de lagos, ríos y arroyos.

En caso de sufrir una mordedura de serpiente terciopelo, es fundamental actuar de manera rápida y acudir a un centro médico de forma inmediata. No intentes tratar la mordedura por cuenta propia ni apliques remedios caseros. Conserva la tranquilidad y evita movimientos bruscos que puedan favorecer la rápida propagación del veneno en el cuerpo. Lo más importante es recibir el antídoto adecuado y seguir las indicaciones médicas.

  • La serpiente terciopelo (Bothrops asper) tiene un patrón de color similar al de la serpiente barba amarilla, con rayas diagonales y diamantes de tonos marrones.
  • Tanto los machos como las hembras pueden medir entre 140 y 250 cm de longitud, siendo las hembras más largas.
  • Las serpientes recién nacidas son más brillantes y los machos juveniles tienen la punta de la cola amarilla.
  • Presenta una foseta loreal a cada lado de la cabeza, entre el ojo y el hocico, que le permite detectar presas que emiten radiación térmica.

A pesar de estas características distintivas, es importante recordar que no todas las serpientes de patrón marrón y diamantes son serpientes terciopelo. Ante cualquier duda, es recomendable mantenerse alejado y no tratar de manejar o identificar una serpiente venenosa sin conocimiento especializado.

Hay algunas cosas que puedes hacer para evitar ser mordido por una serpiente terciopelo:

  • Sé consciente de tu entorno cuando estés en áreas donde se sabe que viven serpientes terciopelo.
  • Usa calzado cerrado y pantalones largos cuando estés en áreas donde se sabe que viven serpientes terciopelo.
  • No molestes a las serpientes terciopelo.
  • Si ves una serpiente terciopelo, no te acerques a ella.
  • Si eres mordido por una serpiente terciopelo, busca atención médica inmediatamente.

Las serpientes terciopelo son serpientes venenosas. Se alimentan de pequeños mamíferos, pájaros y lagartijas.

Las serpientes terciopelo se pueden identificar por su coloración brillante. Son de color verde, amarillo o rojo, y tienen una serie de manchas oscuras en su cuerpo.

Conclusión

La serpiente terciopelo, cuyo nombre científico es Bothrops asper, es un reptil emblemático de los trópicos americanos. Con su característico patrón en forma de “V” a lo largo del lomo y su imponente tamaño de hasta 1.5 metros, la terciopelo infunde respeto.

A pesar de su potente veneno hemotóxico, no representa un gran peligro para los humanos si se le evita y se recibe atención médica a tiempo.

Esta especie de la familia Viperidae cumple un rol ecológico vital en selvas húmedas y bosques, controlando poblaciones de roedores y otros animales. Sin embargo, está amenazada por la destrucción de su hábitat y la caza indiscriminada en algunas zonas.

Es necesario educar a las personas sobre la importancia de proteger a la terciopelo y no matarla por temor.

Mediante la conservación de sus ecosistemas naturales, el respeto a estas serpientes, y un manejo adecuado en caso de mordeduras, la terciopelo puede coexistir de mejor manera con las comunidades humanas.

Concientizar sobre su relevancia ecológica y desmitificar exageraciones sobre su peligrosidad, son clave para la preservación de Bothrops asper. La terciopelo es un reptil que merece nuestra protección para asegurar su supervivencia.

Fuentes consultadas:

Aquí algunas fuentes con información sobre la serpiente terciopelo (Bothrops asper):

– Bolaños, R. (1972). “Toxicidad y algunas características farmacológicas de los venenos de serpientes costarricenses del género Bothrops”. Toxicon, 10(3), 273-277.

– Solórzano, A. (2004). “Serpientes de Costa Rica: distribución, taxonomía e historia natural”. Instituto Nacional de Biodiversidad (INBio).

Savage, J. M. (2002). The amphibians and reptiles of Costa Rica: a herpetofauna between two continents, between two seas. Chicago: University of Chicago Press.

– Ministerio de Ambiente y Energía de Costa Rica. “Bothrops asper”. Sistema Nacional de Áreas de Conservación. https://www.sinac.go.cr/ES/speciesespecialinteres/Paginas/Bothrops%20Asper.aspx

– García J. et al. (2009). “Clinical manifestations of Bothrops asper bites in Colombia: a Literature Review”. Toxicon, 54(8), 1022-1026.

– Otero, R. et al. (1992). “Complications of Bothrops, Porthidium, and Bothriechis snakebites in Colombia”. Toxicon, 30(7), 815-826.

– World Health Organization. (2019). “Snakebite envenoming”. https://www.who.int/news-room/fact-sheets/detail/snakebite-envenoming

– Gutiérrez, J. M. (2011). “Improving antivenom availability and accessibility: Science, technology, and beyond“. Toxicon, 60(4), 676-687.

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Gabriela Fernández Marín

Gabriela Fernández Marín es una destacada bióloga ecuatoriana que ha dedicado su vida al estudio de los seres vivos y sus procesos vitales. Nacida y criada en Quito, pero de padres españoles, desde pequeña mostró un gran interés por la naturaleza y los ecosistemas, lo que la llevó a estudiar Biología en la prestigiosa Universidad Central del Ecuador.

Tras completar con honores su licenciatura, Gabriela decidió continuar su formación académica y se trasladó a México, donde cursó un doctorado en Biología en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).