El misterioso y endémico Gecko de la Isla San Jorge

Los geckos se reproducen a través de un proceso conocido como fertilización interna. Durante la temporada de apareamiento, los machos cortejan a las hembras emitiendo sonidos característicos y realizando movimientos específicos para atraer su atención.

Cuando la hembra está receptiva, el macho se acerca y la monta para transferir el esperma a través de un órgano especial llamado hemipene.

Este proceso puede ser rápido o prolongado, dependiendo de las circunstancias del momento.

Una vez que la hembra ha sido fecundada, comienza el proceso de gestación. La duración de la gestación varía según la especie.

Al finalizar el período de gestación, la hembra pone huevos en un lugar seguro y protegido. Algunas especies de geckos, como el gecko leopardo, ponen huevos blandos, mientras que otras, como el gecko tokay, ponen huevos duros.

Una vez que los huevos son depositados, la hembra abandona el área y no se encarga del cuidado de las crías. Los huevos eclosionan después de un tiempo, y las crías emergen listas para valerse por sí mismas y enfrentarse al mundo exterior.

El Gecko de la Isla San Jorge es un lagarto insectívoro. Se alimenta principalmente de insectos como arañas, grillos, polillas y escarabajos, los cuales caza durante la noche.

Gracias a sus almohadillas adhesivas puede desplazarse sobre troncos y hojas en busca de insectos, los que atrapa lanzando su lengua pegajosa sobre ellos.

También aprovecha el rocío acumulado sobre las hojas como fuente de agua.