Bienvenidos a Animales de Colombia

La tortuga Inguensa (Rhinoclemmys diademata) es una especie de tortuga semiacuática endémica del norte de América del Sur. Se distribuye por Colombia, Venezuela, Guyana y Surinam. Esta especie se encuentra en peligro de extinción, por lo que es importante su conservación.

¡Acompáñame, y salvemos a la Tortuga Inguensa de su extinción!

Descripción

La Tortuga Inguensa tiene un caparazón de forma ovalada, moderadamente abovedado, de color oliva a marrón oscuro, a menudo con una quilla vertebral presente.

Los escudos marginales están adornados con líneas o manchas amarillas radiales. El plastrón es articulado, lo que permite a la tortuga encerrarse completamente dentro del caparazón.

La cabeza es relativamente pequeña, con un hocico puntiagudo, y el cuello está cubierto de tubérculos puntiagudos. Las extremidades están cubiertas de grandes escamas puntiagudas y los dedos están totalmente palmeados para nadar.

Los machos se distinguen de las hembras por una cola más larga y gruesa y un plastrón cóncavo, a diferencia del plastrón plano de las hembras. Las crías tienen el caparazón más redondeado y liso que los adultos. La longitud de su caparazón es de unos 4,5 cm en el momento de la eclosión.

 

Tortuga inguensa

Hábitat y Distribución

La tortuga inguensa, habita en bosques tropicales de tierras bajas, generalmente en elevaciones por debajo de los 300 metros.

Está restringida al noroeste de Colombia, en las cuencas de los ríos Magdalena y Cauca. Su área de distribución se extiende desde el departamento de Antioquia hacia el oeste hasta el departamento del Chocó.

La especie es semiacuática, se encuentra en secciones poco profundas de arroyos y riachuelos, así como en los bosques cercanos.

Requiere cuerpos permanentes de agua dulce. La pérdida del hábitat de bosque ribereño es una de las principales amenazas para la especie.

Esta tortuga es un excelente nadador y buceador, y pasa gran parte de su tiempo en el agua. Sin embargo, también necesita salir del agua para descansar y tomar el sol.

 

Dieta

La tortuga inguensa es omnívora y se alimenta tanto de plantas como de animales.

Plantas acuáticas, frutas, carroña, insectos, gusanos, caracoles y peces pequeños forman parte de su variada dieta.

Con sus robustas mandíbulas, la tortuga puede triturar moluscos y otras presas de caparazón duro.

Esta tortuga es un depredador importante en su ecosistema, y ayuda a controlar las poblaciones de insectos y otros animales.

Tortuga galapago de Maracaibo
Tortuga del pacifico colombiano

Reproducción

  • Se sabe poco sobre la reproducción de las tortugas inguensa en libertad.

  • Basándonos en especies emparentadas, es probable que alcancen la madurez entre los 5 y los 10 años de edad.

  • Las hembras probablemente ponen una sola nidada de 5-10 huevos durante la estación húmeda.

  • Los huevos probablemente se entierran en nidos en tierra cerca del agua.

  • Las crías emergen tras una incubación de unos 90 días.

Estado de Conservación

  • La tortuga inguensa está clasificada como Vulnerable por la Lista Roja de la UICN.

  • Las principales amenazas son la destrucción de su hábitat por la agricultura, la tala, los asentamientos humanos, la contaminación y las plantas invasoras como el jacinto de agua.

  • La recolección para el comercio internacional de mascotas también supone una amenaza.

  • La introducción de especies exóticas también representa una amenaza para la tortuga Inguensa. Algunas especies de peces depredadores, como el pez león, pueden atacar a las tortugas Inguensa.

  • Varias zonas protegidas dentro del área de distribución de la tortuga ofrecen cierta protección, pero es necesario mejorar la gestión del hábitat y las medidas contra la caza furtiva.

    Como estrategia de conservación se ha sugerido repoblar las poblaciones silvestres con tortugas sanas criadas en cautividad.

    Los programas de educación pública centrados en la biodiversidad única de la región podrían ayudar a generar orgullo y concienciación. Las iniciativas agroforestales que permiten la conservación forestal en tierras privadas también son prometedoras para proteger los bosques de ribera.

Rhinoclemmys diademata

Curiosidades de la Tortuga Inguesa

La tortuga Inguensa es una especie fascinante que esconde muchas curiosidades.

Aquí tienes algunas de ellas:

  • Su nombre científico, Rhinoclemmys diademata, significa “tortuga con corona de nariz”. Esta denominación se debe a la mancha amarilla en forma de herradura o “V” que tiene en la cabeza.
  • Es una especie omnívora, pero su dieta está compuesta principalmente por insectos, gusanos y plantas acuáticas. También puede comer peces, ranas y serpientes.
  • Es una excelente nadadora y buceador, y pasa gran parte de su tiempo en el agua. Sin embargo, también necesita salir del agua para descansar y tomar el sol.
  • Es una especie ovípara. La hembra pone entre 2 y 12 huevos en un nido excavado en la tierra. Los huevos eclosionan después de unos 70 días.
  • La tortuga Inguensa se encuentra en peligro de extinción. Las principales amenazas para esta especie son la pérdida de hábitat, la caza furtiva y la introducción de especies exóticas.

 

Otras curiosidades más específicas sobre la tortuga Inguensa:

  • Los juveniles de tortuga Inguensa tienen un caparazón más liso que los adultos. El caparazón de los adultos se vuelve más rugoso y abombado con el tiempo.
  • Las tortugas Inguensa son capaces de respirar bajo el agua durante períodos cortos de tiempo. Esto les permite bucear para buscar alimento o escapar de los depredadores.
  • Las tortugas Inguensa son animales sociales. Se reúnen en grupos para descansar, tomar el sol y reproducirse.

 

La tortuga Inguensa es una especie importante para el ecosistema colombiano. Su conservación es fundamental para mantener la biodiversidad de nuestro país.

Preguntas Frecuentes

la tortuga inguensa, es una de la especies de tortugas, que está en peligro grave de extinción, la deforestación, la caza furtiva y otras causas que el hombre hace, la llevarán al exterminio.

Preguntas y respuestas sobre la Tortuga Inguensa

La tortuga Inguesa (Rhinoclemmys diademata) se encuentra en peligro de extinción. Esta especie está clasificada como “En Peligro” en la Lista Roja de la UICN.

Las principales amenazas para la tortuga Inguesa son la pérdida de hábitat, la caza furtiva y la introducción de especies exóticas.

La Tortuga Inguesa es una especie endémica de Colombia que habita en los bosques húmedos de la región andina, y en la costa de la región pacífica.

 

La esperanza de vida de la tortuga Inguesa es de unos 30 años.

Sin embargo, se han documentado casos de tortugas Inguesa que han vivido más de 50 años.

La Tortuga Inguesa es una especie ovípara que pone entre 2 y 4 huevos por nidada. El período de incubación dura entre 90 y 120 días

Los depredadores naturales de la tortuga Inguesa incluyen a los caimanes, las serpientes y los peces grandes.

Las crías también pueden ser presa de las aves rapaces.

En Colombia, la tortuga Inguesa está protegida por la Ley 1774 de 2016, que prohíbe su caza, captura y comercialización.

Además, se están llevando a cabo diferentes proyectos de conservación para proteger el hábitat de esta especie.

Estos proyectos incluyen la creación de áreas protegidas, la educación ambiental y la investigación científica.

Conclusión

La única y hermosa tortuga inguensa, se enfrenta a un futuro incierto en Colombia. Se necesitan urgentemente estrategias de conservación específicas que protejan el hábitat restante, limiten la recolección y mantengan poblaciones silvestres sanas.

Con una gestión adecuada, esta especie puede sobrevivir y seguir desempeñando su papel vital en sus delicados ecosistemas ribereños. La tortuga inguinal es sólo una de las muchas especies amenazadas que hacen de Colombia uno de los países con mayor biodiversidad de la Tierra.

Picture of Gabriela Fernández Marín

Gabriela Fernández Marín

Gabriela Fernández Marín es una destacada bióloga ecuatoriana que ha dedicado su vida al estudio de los seres vivos y sus procesos vitales. Nacida y criada en Quito, pero de padres españoles, desde pequeña mostró un gran interés por la naturaleza y los ecosistemas, lo que la llevó a estudiar Biología en la prestigiosa Universidad Central del Ecuador.

Tras completar con honores su licenciatura, Gabriela decidió continuar su formación académica y se trasladó a México, donde cursó un doctorado en Biología en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).